Chile, un país en cambio: racismo y el desarrollo

En Chile, hay una mentalidad muy fuerte; la mentalidad, en mi opinión, es primariamente un nacionalismo, pero un nacionalismo que está afectado por una baja autoestima. Como un país en total, Chile le gusta considerarse uno de los mejores países de América Latina. Esta noción no es incorrecta, Chile tiene una de las economías más fuertes y estables por el continente, la democracia de hoy en día es más mejor que la mayoría del resto de la región. Los chilenos dicen con orgullo que su país no fue afectado mucho por la recesión económica. Pues, sí, Chile es un país muy bueno bajo estas consideraciones, y por eso, muchos chilenos tienen los pretensos de superioridad, siquiera a sus vecinos. En contrario a la “superioridad chilena” hay también un sentimiento de inferioridad a otros países, principalmente ellos de Europa y América del Norte. También, con el crecimiento económico en Brasil en los años recientes, los chilenos se consideran Brasil como un buen modelo al resto de América Latina y que no son superiores a los brasileños.

El concepto de raza en Chile es parte de esta noción de superioridad.  En general, Chile es considerado uno de los países más homogéneo en América Latina,  tanto a nivel cultural y étnicamente. Debido a eso, es poco más comprensible que hay una ignorancia sobre las otras razas, pero, este racismo es ubicuo por todo el país. No hay informes o estadísticas que demuestran que los chilenos son racistas especialmente contra los peruanos o bolivianos, pero creo que hay una correlación. Los antagonismos con Bolivia y Perú son históricos, Chile nunca ha tenido relaciones buenas con sus vecinos, y hay un disgusto muy fuerte que ya existe contra ellos. En cualquier lugar en Santiago, puedes encontrar a una persona que quiere compartir su opinión negativa de la gente de estos dos países. Una vez, estuve a un paradero de bus y un viejo me preguntó de donde soy, porque era obvio a él que no soy chilena. Después le dije que soy de los estados unidos, él empezó una diatriba sobre la inmigración de los peruanos y bolivianos a chile. Él dijo que los bolivianos “son un cáncer a la sociedad chilena.” Obviamente, yo estaba en la incredulidad que alguien diría algo como eso, pero me hizo preguntarme, un odio tan fuerte como eso no es un resultado de una guerra de más de 120 años, hay algo más que afecta esta relación tensa. Una de las cosas más obvias es que en Perú y Bolivia, las poblaciones indígenas son más prevalentes, entonces, las identidades peruanas y bolivianas están en contra con la que es preferida en Chile.

En Chile, hay una norma social que prefiere la apariencia menos indígena. Esta preferencia transciende todos aspectos de la vida cotidiana: está presente en la lengua vernácula, en las peluquerías, los anuncios, las solicitudes de empleo y con las nombres. Dos palabras muy común en chile son “cuico” y “flaite”. Estas palabras significan respectivamente, a un nivel más correcto políticamente, “rico” y “pobre”. Cuico significa rico, pero, también significa todas de las cosas que es percibida que los ricos tienen, como ropa cara, coches enormes, etcétera. Por otro lado, flaite significa las cosas más pobres, más boratos o que no funcionan muy bien.  Hay un elemento más racista de estas palabras también. Cuico incorpora la apariencia más europea que los chilenos prefieren, como piel más pálida, pelo liso, ojos azules, y también un apellido europeo, con origines de Alemania o Italia. Flaite, en contrario, incorpora la apariencia menos preferido, la de los indígenas, piel oscura, pelo rizado u ondulado y menos altura. 

Es muy fácil comprender lo que es considerado lindo en Chile; cuando vas a Jumbo, los vendedores en los pasillos representan la idea chilena de la belleza. Esta imagen está presente en los anuncios también. Por cualquier parte de Santiago, puedes encontrar un anuncio para zapatos o medicina, la mayoría de ellos tienen modelos más “cuicos”.  Es una cosa muy interesante. Chile se considera como un estado muy avanzado, y en algunos lugares, este es la verdad, ¿pero como un país tan avanzado sea tan racista al mismo tiempo? Recientemente, las poblaciones indígenas de Chile, primariamente los Mapuches y los Rapa Nui ha instituido programas que exigen al gobierno representación en el Congreso y protección de sus territorios y cultura. También hay muchos movimientos contra el racismo de estos grupos. Cuando buscas en Google “racismo en Chile” la mayoría de los sitios sugeridos son de páginas que insisten (por muchos chilenos y extranjeros) que no hay racismo fuerte en Chile, el prejuicio es clasismo. Este reclamo es válido, pero lo ignora el hecho que usualmente, las clases chilenas son divididas por raza. Históricamente cuando los europeos invadieron un nuevo territorio, como lo que pasó por todo el continente americano, los grupos indígenas eran y siguen siendo marginalizados. Bajo de Michelle Bachelet, Chile mejoró la pobreza nacional, pero eso estuvo mayormente en las ciudades, no en el campo. Según el Banco Mundial, la mayoría de los indígenas chilenas viven en el campo y no recibieron mucha ayuda del gobierno contra la pobreza. Ellos con más acceso a la educación y oportunidades de empleo, más acceso a mejorarse son ellos que ya tienen dinero.  Entonces, los indígenas por muchas razones representan la pobreza en Chile.

Para muchos extranjeros que visitan Chile, el racismo es fuerte y raro. Es extraño que haya una jerarquía social entre las razas en Chile. Espero que los movimientos de los indígenas sean efectivos. Me parece que Chile es un país en el proceso de cambiarse. Recientemente, la gente chilena se despierta y ahora, están exigiendo más cambios democráticos, como acceso igual a la educación, y más representación en general. Ojalá que este cambio transcienda la raza, y la incorporación social se extienda a los indígenas también. Es lúdicro que Chile requiere que una persona que está solicitando un empleo tiene que entregar una foto personal con su currículo vitae, es racismo reglamentado. 

Me parece que en general, América Latina, como lo que los académicos recientemente decidieron sobre África, es subjeto a los estandares occidentales. Muchas personas están confundidas porque África no funcionaba y no sigue funcionando como un país europeo, la razón es que, los estados africanos no tenían (y no tienen) la infraestructura para funcionar como un estado europeo, es una comparación de cosas completamente diferentes. Creo que, por muchos años, América Latina era lo mismo, pero ahora, la sociedad civil por todo el continente, incluyendo Chile, se despierta y ahora la gente está exigiendo un país, un continente más libre, más justo para todos. Y espero que este continúe y corrija las ideas del racismo y elitismo que plagan el continente, especialmente Chile. El disgusto histórico con los peruanos y los bolivianos hace peor  el racismo chileno. Ahora, Chile se pega, necesita crear relaciones mejores e iguales con sus vecinos y se abre a las razas diferentes. Lo que fue permisible en el pasado necesita cambiar. Si Chile quiere ser un país más avanzado, necesita cambiar su mentalidad sobre su gente, todos son parte de la sociedad, y la no puede funcionar sin ellos.